En la imagen se puede observar a un hombre de edad avanzada con poco cabello en su cabeza. En su frente se evidencian algunas arrugase;señal de su condición.Cejas poco pobladas,ojos pequeños, mirada caída; reflejando dolor o sufrimiento, pómulos marcados, lo que hace evidenciar su contextura delgada, además hace resaltar más arrugas alrededor de su boca, la cual está cerrada y es pequeña. Su nariz es grande pero acorde a su rostro, a los lados de ella y debajo de sus ojos hay unas bolsas que resaltan cansancio. El conjunto de su cara es la suma de una persona que ha sufrido, fatigada y en busca de descanso.
Adicional a lo anterior en su espalda se despliegan dos alas. El ala derecha ubicada en la parte izquierda de la hoja se despliega hasta la parte superior de la imagen. Por otra parte, la del lado derecho está doblada hacia la izquierda tapando el hombro y el pecho del anciano, dejando solo a la vista el hombro derecho de él. Las plumas de sus alas están desgastadas, con un mal aspecto; sucias y algo desplumadas.
Laura Alexandra Aconcha R.
Leidy Johana Niño S.
En la imagen, se puede observar un ángel solitario, con alas muy grandes de aspecto poco agradable, debido que sus plumas son desorganizadas y sucias. Con respecto a su ropa, teniendo en cuenta lo poco que se puede detallar; su camisa o tal vez túnica se nota trajinada y desecha, lo cual permite determinar que es una persona errante, que no ha contado con muy buena suerte.
Por otra parte el rostro muestra un hombre viejo, con actitud triste, ida y algo pensante, lo cual se determina en su mirada;donde sus ojos poco pueden verse, a causa de las bolsas ubicadas alrededor de ellos. Su nariz que está bastante comunicada con su boca, es alargada y con cierta deformidad en la parte superior. La boca del individuo está conformada por labios delgados y un tanto hundidos al igual que sus pómulos, que permiten predecir la delgadez de su cuerpo.
Leidy Johana Niño S.
En esta imagen contemplamos un señor muy viejo con sus
enormes alas, las cuales unas de ellas la tiene estirada al horizonte dando a entender que de ese lugar provenía;
En su cara vemos a una persona anciana, acabada, sin ganas de vivir,
triste tal cual como refleja su físico y
su vestidura, la cual era de un trapero viejo; le quedaba unas hilachas que le
descolgaban de su cráneo casi pelado.
También podemos ver que el triste viejo se refugiaba de algo
en el peor de los casos de pronto de él mismo, tratando de esconder la
cruel realidad de un viejo feo, sucio, mal arreglado solo sin ganas de vivir y
como si se escondiera de dicha realidad, con una de sus alas, la cual era la
que le quitaba la tranquilidad pero al mismo caso y sin saberlo esa misma ala le
brinda seguridad.
Sergio López Díaz
Su estructura es muy llamativa y posee una buena redacción ortográfica.
ResponderEliminar